jueves, 22 de septiembre de 2011

"Be heard, be seen, be you" by Kate Apanui

Kate Apanui is a Martha Beck certified Life coach. She’s Passionate about working with women who are ready to shine and step into their power in a way that creates magic and change in the world. Her work is guided by the belief that when we bring our truth to the surface, we become deeply powerful. Kate is a New Zealander, currently living in France with her husband, daughter and bulldog. Before moving to France and becoming a life coach, Kate was a Registered Nurse working in New Zealand. Currently she's adding to her training and working with Koelle Simpson to become an Equus Coach, which involves using horses to help people identify areas of their life where they can strengthen their communication and leadership skills.

Kate will join us in Saas-Fee to uncomplicate the concepts of leadership and energy. She will be talking about the power of non-verbal communication, true leadership, and looking at what nature has to teach us. Verbal language represents only about 10% of what we communicate - the rest is non-verbal. Kate will be demonstrating and talking about the how to’s of leading your own experience, by using the mind and body as a whole.

You can learn more about her and her True Nature Life Coaching here: http://www.truenature.me/

martes, 9 de marzo de 2010

El color de las sonrisas

No me considero una feminista convencida, ya que siempre he creído que la solución al mundo de hombres, no es hacer un mundo violeta, aunque a veces sería más bonito que un ambiente monocromo por eso me planteo que si las mujeres empezamos a andar sin mirar a nuestro alrededor, para llegar a nuestros objetivos personales y profesionales, es porque lo que hay a nuestro alrededor no es precisamente lo que nos gustaría tener.
¿Es el snowboard un verdadero mundo de hombres?
Igual que escogemos la lente de nuestras gafas según el día que hace, ¿también debemos escoger nuestra profesión, o la manera de hacer nuestra profesión según nuestra personalidad?
Si tenemos realmente ese control, yo creo que puede haber dos tipos de riders, y eso también se aplica a los fotógrafos:
Los que compiten y lo que no, pero que son en todo caso profesionales.
Aimee es mi mejor ejemplo de rider de competición, tiene sus amigas y sus confidentes en el mismo circuito, comparten habitaciones, viajes y experiencias. Parece fácil, pero también tiene que soportar la presión de las grandes finales y los complicados calendarios.
Por otro lado, Anne Flore es la controversia de la competición, no quiere presión de terceros, más que la que ella misma se imponga, pero aquí es cuando entra en juego el género de nuestro deporte, “te encuentras muchas piedras en el camino de esta industria por ser mujer y ser europea, aunque los de tu crew son tus amigo porque compartes el día a día y la montaña con ellos, muchas veces te sientes rechazada y sobretodo sola, pero por otro lado no podría soportar la presión de la competición y lo dejaría enseguida”.
La razón del color violeta esta conversación, no es su connotación feminista sino la ilusión de pintar una casilla que parece ser o blanca o negra, y digo parece, ya que intercambiar una sonrisa es tan fácil como sonreír allá donde tu camino te lleve.


*En la foto Cheryl Maas vestida en violeta, en los entrenamientos de los X Games de Tignes que se acaba de lesionar el talón y baja andando al pie de la estación, pero seguro que, aunque no se vea en la foto, está sonriendo.

miércoles, 24 de junio de 2009

"No he podido competir porqué soy una chica"

Se realizan todo tipo de eventos en las grandes ciudades para promocionar des de un detergente a una nueva bebida o un nuevo grupo de música.

El pasado 6 y 7 de junio fue el turno de los deportes extremos como hilo conductor para publicitar todos los patrocinadores del festival: de una compañía telefónica a marcas de ropa y material deportivo.

Creo que es genial la idea de intentar reunir muchos de los deportes conocidos como urbanos y extremos en un mismo festival para ofrecer espectáculo y a su vez interactividad con el público asistente.

Aunque una buena idea no siempre implica un buen resultado. La intención suele ser la mejor, pero en un proyecto de estas características no debería haber contradicciones.

En primer lugar, Barcelona des de su Ayuntamiento en este evento se dio a conocer como una ciudad joven que le da importancia y valor a la cultura y deportes urbanos mientras la policía está recorriendo sus calles persiguiendo a los skaters que patinan en las plazas porque no hay instalaciones adecuadas en la ciudad para practicar su deporte favorito.

En segundo lugar, estamos en el siglo XXI en el que la mujer es valorada, o debería serlo, de la misma manera que cualquier hombre, no se le puede privar la participación en una competición por el simple hecho de su condición de mujer. Porque, ¿visteis alguna chica haciendo esquí o snowboard? Había unas cuantas espectadoras que habían viajado des de diferentes partes de España para asistir a la competición aunque no pudieron participar.

Por cierto, en una competición de esquí o snowboard el snowflex o ese “plástico verde que rasca y no resbala” debería estar prohibido.

En fin, es admirable que haya gente que siga apostando por los deportistas y deportes minoritarios. Los jóvenes españoles tienen cada vez más nivel dándole al país una posición internacional en resultados y competiciones, pero hasta que no se entiendan como son des de la esencia de cada uno de los deportes y se den a conocer como tal, los practicantes seguiremos siendo los gamberros o los locos que hacemos piruetas imposibles en lugares poco adecuados.

miércoles, 22 de abril de 2009

Estos días de primavera en los que sale el sol y apetece pasear por el pueblo no hago más que cruzarme con gente que anda con muletas o con una manga colgando.
Se acerca el final de la temporada y mientras me acerco cojeando a la plaza, sólo veo gente lesionada.
¿Nos lesionamos por qué no sabemos “surferar” o por qué lo hacemos demasiado bien?
Cuando tienes un cierto nivel parece que sólo puede progresar entre lesión y lesión, porque cada vez vas a por algo mayor, y hay intervalos en los que “todo esta controlado...” hasta que se descontrola.
No somos máquinas, fallamos. Si somos afortunados, y sabemos caer, las consecuencias no serán tan graves, pero sino... se te pueden acabar muchas cosas durante mucho tiempo.
No quiero ser pesimista, pero si invitar a buscar la progresión, ya que ésta, aunque muchos lo crean, no viene predeterminada para todos igual. Cada uno tiene que encontrar su método y velocidad de aprendizaje para evitar que el fin de la temporada llegue antes que la primavera.
Pero no he dicho que sea fácil.

miércoles, 15 de abril de 2009

Palilleros vs. Tableros

Miramos por encima del hombro, andamos de lado y tenemos los pies atados a una misma tabla. Tenemos fama de gamberros, de derrapadores, de inconscientes e incluso de peligrosos. Aún así, estamos de moda.
El éxito del snowboard nació junto al freestyle, la adrenalina que le acompaña y la espectacularidad que ofrece.
Aunque al principio los parques parecían estar reservados para nosotros, no tardaron en verse osados esquiadores intentando los módulos.
A día de hoy podemos decir que los esquiadores saltan más alto, rotan más rápido y gustan, gustan mucho.
El eterno debate de “esquí o snowboard” vuelve a estar sobre la mesa, hasta el extremo de desprestigiarse uno a otro:
No hace mucho, un amigo, esquiador, me decía que el estilo de los palilleros no tiene nada que ver con el de los frikis, que es mucho más potente y espectacular, que el nivel es mayor. A lo que yo le contesté que ni uno ni otro es fácil, pero que cuando te diriges a un salto con esquís, por sus características, te sientes más natural. Factor que facilita la ejecución de un truco más complicado.
La verdad, es que me molesta oír discusiones del tipo: “mi deporte mola más que el tuyo y por eso te falto al respeto”. Y por desgracia tenemos intolerantes y maleducados en los dos bandos.
Yo os invito a compartir los parques, las pistas y la montaña porque la competencia es buena y nos ayuda a progresar día tras día. Esto no quiere decir que no podamos preferir uno, pero siempre sin faltar al respeto al compañero, porque molesta, cansa y te puede amargar el día de riding, que al fin y al cabo es a lo que has ido...

miércoles, 28 de enero de 2009

Snowboard, ¿deporte de masas o deporte espectáculo?

En la sociedad actual es común oír palabras como “masas” o “espectáculo”, sin embargo las miles de definiciones que rondan por ahí son a menudo poco fundamentadas y/o contrastadas.
Los deportes suscitan pasiones por su factor competitivo y de identificación con los atletas, y algunas veces, aunque menos, por el estilo de vida que conllevan,(pero esto ya es otro tema).
Cuando hablamos de un deporte de masas, ¿se refiere a los practicantes o a los seguidores? Un artículo de un periódico nacional hablaba de un deporte de masas reservado para unos cuantos, como es la fórmula 1. Lógicamente existen también las críticas a la manera de valorar la fórmula 1 como un deporte de masas.
Si el deporte es una actividad física, con competición implícita o no, se podría llegar a la conclusión de que son de masas aquellos deportes que los practica un gran número de personas: la masa.
Los espectadores de un evento deportivo, no tienen porque ser practicantes del mismo. O sí. Por lo que a mi personalmente me gustaría diferenciar los deportes que tienen una gran afición a los que tienen un gran número de aficionados.
La práctica del snowboard aumenta indudablemente año tras año. Pese que en España es difícil saber con exactitud el incremento de practicantes, salta a la vista la cantidad de riders que encontramos en la montaña y es que a veces las cosas no se valoran tanto con cifras sino con hechos: la adaptación de las estaciones de esquí de la península a las exigencias de la práctica del snowboard y del freestyle en general habla por si sola.
¿Podemos ya llamarle deporte de masa?
Creo que todo es relativo. En un país en que la cultura de montaña y de nieve es más bien escasa, es muy difícil que un deporte como el nuestro cuente con un número de practicantes exageradamente elevado. Sin embargo, en países dónde la montaña está integrada en el día a día y como tal sus deportes, es más común que el snowboard vaya ganando, o esté ganando, terreno, por ejemplo, al esquí.
Una cosa lleva a la otra, como más practicantes tiene un deporte, más aficionados al mismo, más afición se crea verso a él. Por lo que los eventos deportivos cobran mayor importancia, los organizadores son conscientes de ello y los montan para las masas: Grandes dimensiones para un gran espectáculo. Y es que las competiciones urbanas en grandes ciudades, dónde la nieve está descontextualizada y se enfatiza a los propios deportistas, están de moda. Quizás por la novedad, la originalidad o tan sólo por la espectacularidad que contiene en si mismo, el éxito está garantizado. Intentad explicar sino, las 27.500 personas asistentes al Air&Style de Munich del 2006.
Algunos dicen que las masificaciones no son buenas, otros opinan que reportan facilidades ya sea por encontrar más variedad en material muy específico o viajes más económicos, aunque vengan de la mano de las aglomeraciones. Yo prefiero pensar que los snowboarders somos una masa pequeña e unida, una muchedumbre como diría el sociólogo Blumer, que crece poco a poco para nuestro propio bien. Sea o no espectacular, porque en definitiva el espectáculo del snowboard es el que lleva cada uno dentro cuando lo practica.

lunes, 12 de enero de 2009

Introducción de SnowboardVisón

Cuando un deporte se convierte en un estilo de vida para sus aficionados y en un espectáculo para los visitantes, nace algo así como “la comunidad deportiva”.
Vemos numerosos ejemplos en la sociedad actual empezando por el fútbol, las carreras de caballos e incluso el golf.
De hecho, la gran mayoría de deportes conllevan un estilo de vida y ofrecen espectáculo, pero no todos son los “deseados”.
Los deportes de riesgo, sólo por llevar este apellido parecen reservados a los más aventureros y osados, aunque yo incluso me atrevería a decir adinerados. Se convierten de esta manera en una actividad de la cual no todo el mundo puede disfrutar.
Suelen practicarse en plena naturaleza y en condiciones extremas de frío, calor, viento, altura,... o todo a la vez. Lo que implica movernos de nuestro hábitat natural: pueblos o ciudades, con el significado intrínsico de viajar.
La reacción de la adrenalina corriendo por las venas es otro factor idealizado, buscado y codiciado por muchos, asociado inequívocamente a los deportes de aventura.
Tan sólo con observar como un “loco” escala una pared aparentemente lisa a 100 metros del suelo, un “curioso” se adentra a las profundidades marinas sin saber qué hay a su alrededor o ver el que se tira de un rascacielos y abre su paracaídas a tocar del suelo, nos produce una sensación de inquietud y alivio a la vez, de sufrimiento y recompensa, un mareo en el estómago que queremos volver a sentir.
Nos sentimos identificados con un deportista de pies a cabeza, aunque no lo vemos como tal, porque su lugar de trabajo no es ni el gimnasio, ni una cancha, y nos sentimos ansiosos para que gire la cabeza y la cámara enfoque que hay más allá del río bravo y ver ese paisaje espectacular al que siempre hemos querido viajar.
El Freestyle es una oportunidad magnífica para dar a conocer la versión más “libre” y urbana de muchos deportes que grabarlos en su verdadero entorno se convierte en una tarea realmente difícil.
El SNOWBOARD se ha posicionado como uno de los deportes de invierno favoritos y más recurrentes, con la explosión del freestyle y todas sus variantes, creando su propia comunidad deportiva y creando altísimas expectaciones tanto de los practicantes como de los espectadores.
En este espacio web pretendo analizar des de mi punto de vista de dentro del snowboard, pero observándolo des de una distancia de seguridad, el propio deporte, sus deportistas, los eventos, la aceptación del público y de la gente de a pie. Así como analizar su mercado, las estrategias de las marcas tan presentes e importantes, aunque parezca paradójico, en la montaña y un sin fin de aspectos y valores que lleva asociados este mágico deporte.